Durante una alocución en la Cámara Americana de Comercio de República Dominicana , Abinader señaló que se enfocará en atraer la inversión extranjera directa, ya que es el motor del desarrollo, y garantizar así un claro orden reglamentario para competir, además de combinar el control del coronavirus con la activación económica, la generación de empleos y cambios en el modelo de desarrollo. Para ello, haremos lo que debió hacer esta administración durante la presente crisis, ejecutar un programa masivo para detectar, aislar, rastrear y tratar a los contagiados y sus contactos para controlar la propagación del COVID-19″, dijo Abinader al auditorio virtual de la Amchard. “Controlar la propagación del virus es un requisito indispensable antes de pasar a organizar y ejecutar un plan integral de estímulos para la recuperación y la reactivación del crecimiento económico”, resumió. «Para recuperar el nivel de actividad anterior a la pandemia será necesario recurrir a estímulos económicos y financieros que permitan un rápido retorno al crecimiento».
Citó que tanto la teoría económica como la experiencia práctica de crisis anteriores indican que un fuerte componente de gasto público a través de subsidios, transferencias de efectivo, préstamos blandos y beneficios fiscales para las personas y las empresas, es la fórmula adecuada para recuperar el crecimiento. “”Si queremos generar un círculo virtuoso de producción y consumo es imprescindible proporcionar facilidades financieras a las empresas para invertir y devolverles la capacidad de compra a las personas e incentivar la producción. Abinader indicó que los expertos consultados coinciden en que el problema de nuestra balanza comercial no es por falta de acceso a mercados, sino por falta de competitividad sistémica para desarrollar una cultura exportadora. Vale decir que nuestras instituciones funcionan en forma deficiente, la provisión de los servicios públicos es insuficiente y de mala calidad, el sistema de justicia no opera de la mejor manera y predominan estructuras monopólicas de mercados que distorsionan el sistema de precios.